martes, 11 de mayo de 2010

Ha muerto Frank Frazetta


Mandaba un mensaje esta mañana a un compañero. "Ha muerto Frank Frazetta...puff...estoy destrozado". No parecía particularmente importante un nombre para el que muchos no significa demasiado. La cosa cambia cuando digo que tanto para mí, como para cientos de dibujantes y de artistas de todo el mundo, marcó el límite y los sueños de llegar a hacer maravillas como las que salían de sus lápices y pinceles.

No es un homenaje justo, ni tampoco un panegírico apropiado, pero hace un año le dediqué parte de un trabajo sobre movimientos artísticos. Creo que había más cosas escritas sobre él, pero sólo encontré esto. Ahora lo ojeo con los ojos un poco más apagados, tristes y llorosos.

"Frank nació en Nueva York el 9 de febrero de 1928. Como tantos grandes, era un niño prodigio con un talento artístico natural, pero desperdiciado, hasta que entró en la escuela Falange School of Art. Empezó a trabajar profesionalmente con 16 años en el mundo del cómic con dibujos para pequeñas historietas de la época como “Snow man”, “Barney Rooster” o “Johny Comet”. Frazetta no tardaría en dar el salto al “verdadero arte” con varias ilustraciones y portadas para revistas pulp y detectivescas, muchas basadas en los relatos del escritor americano Ron E.Howard (“Conan”, “King Kull”).

Años más tarde, en plena década de los sesenta, comenzaría a trabajar como cartelista para películas de bajo presupuesto en Hollywood. No obstante, por un cartel de película le pagaban 100 veces más que en cualquiera de sus trabajos de cómic. Esta etapa le sirvió para despegarse de lo que hacía como ilustrador, a comenzar a trabajar con las acuarelas y anticipó lo que sería su obra en el futuro, a finales de esa misma década.

En los años 40 y 50 no había mercado para este tipo de artistas, ni siquiera en el cine. El único canal para la creatividad de Frazetta fueron las novelas gráficas, así que cuando la industria del libro dio un giro y se puso de moda la ficción, vio un posible mercado para lo que le gustaba hacer: imágenes grandilocuentes, violentas y muchas veces sobreexageradas de fantasía heroica, western y ciencia ficción. Así empezó a pintar para la literatura, y en 1962 le ofrecían ilustrar el que sería su primer trabajo importante en este mundo: “Tarzán y el Imperio Perdido”. Esta colaboración empezaría una larga y fructífera carrera como diseñador de portadas para varias novelas de aventuras y libros de bosillo. Frazetta terminó por meterse en una situación un tanto irreal, porque sus portadas eran tan potentes que los libros se vendían solos, independientemente de lo que tratasen.

Frazetta cambió el mundo del arte fantástico. Un artista de lo más completo, clásico, con una técnica maravillosa, casi siempre realizando dibujos de plumilla y tintero, un estilo en el que predomina la sutileza, la habilidad y la destreza manual que requiere esa técnica. Un ilustrador surgido de la nada. Frazzetta es sexualidad en estado puro. Frazzetta es probablemente el artista más influyente de los últimos 50 años.

Frank Frazetta pinta con una insistencia innata. La fuerza y el dramatismo es el aspecto más representativo de la obra de Frazetta, aunque sus creaciones sean más ricas y profundas. Sus dibujos causan un impacto inmediato, en parte mérito del dinamismo y el vigor con el que consigue retratar el cuerpo y los músculos de las figuras. Sus personajes quieren salirse del cuadro, consigue crear un relieve ilusorio en la composición y el uso del fondo que provoca ese efecto inmediato en el ojo del que lo ve. La obra de Frank tiene algo profundamente primitivo. Lo que le hace único como artista es la posibilidad de capturar el momento de máxima tensión en todas sus ilustraciones, congelar la imagen en el detalle, pero conservando un movimiento aparente. “Dibuja a un tío de pie y parece que se mueva”, así definió Ralph Baskhi su trabajo, director con el que trabajaría codo con codo.

“Tygra: Hielo y Fuego” fue el resultado producto de la colaboración entre estos dos grandes iconos del género fantástico: la leyenda del cómic moderno Frank Frazetta (creador de Conan el Bárbaro, Vampirella y las portadas de los libros de Edgar Rice Burroughs) y el controvertido dibujante Ralph Bakshi, director de Fritz the Cat, Wizards y de la primera versión animada de El Señor de los Anillos.

La película, pese a ser un fracaso total en taquilla, llegó a convertirse en una de las películas más importantes dentro del cine de animación. Una experiencia única que recurría a los mismos tópicos de la serie homónima de pinturas que realizara el creador de Conan tiempo atrás: salvajes guerreros, monstruos terroríficos, sensuales mujeres, tierras perdidas…y que recreaba su personal estilo.

Sus trabajos sobre Conan acabaron llegando a manos de John Milius, director que llevaría al bárbaro (junto al productor Dino De Laurentiis) a todos los cines. La versión de Conan de Frazetta fue la definitiva, y para la película se llegaron a utilizar como referencia muchas de las imágenes (gran parte como diseños de vestuario y de escenografía) que se habían ido realizando desde 1960 a 1970 por el dibujante. En la adaptación a la gran pantalla, Milius intentó captar la misma sensación, la misma luz de sus cuadros, e incluso hay un par de escenas en la película que están completamente dedicadas a Frazetta: una, es la secuencia del cuarto de la orgía; otra, la pelea que se desencadena casi al final.

Como artista cubre muchos campos: aventura, acción, terror, erotismo (a veces más cerca de la pornografía), la ciencia ficción…pero eso no le niega como artista, aunque como tal se le haya reconocido más como ilustrador (por el uso que se da a sus pinturas) que dentro de este gremio.

“Me considero un artista, no solo un ilustrador de ficción. Mi obra surge de mi imaginación. Nada de copias. Nada de fotos. Acentuó una composición y un diseño que se acerquen a lo abstracto, independientemente del motivo”. (FF. 15 de enero de 1996)

Como los grandes artistas de la historia, Frazetta se siente cómodo en cualquier medio que elige: escultura, pintura, acuarela, plumilla y tintero, lápiz. Y más allá: cómic, literatura, arte serio...

Hoy en día, aún estando retirado, se habla de Frazetta como un fenómeno artístico que creó un culto alrededor de las pinturas fantásticas. Frazetta podría haber practicado cualquier tendencia, podría hecho pintura abstracta o figurativa y exponer en cualquier galería del circuito artístico. Si se quedó con el arte comercial es porque quiso y porque sabía que su obra trascendería el género. Y así fue."

Siempre he pensado que Frazetta era el Johny Cash del dibujo. Me duele tanto su pérdida...Nadie dibujó titanes, héroes y,sobre todo, mujeres como él. Ahora me encuentro acariciando la tapa de un regalo llamado "El pueblo del Círculo Negro"..."Otras historias" aparece más pequeño debajo. Conan sale dibujado en el centro.

2 comentarios:

Monica dijo...

Pues vaya :S

Monica dijo...

Necesito tu gran juicio y opinión como artista...pásate por mi blog plis